DATOS DEL LIBRO
Título: La princesa prometida
Editorial: Ático de libros
Autor: William Goldman
Nº de páginas: 392
Género: Fantasía, romántica, aventuras
ISBN: ISBN: 978-84-16222-63-6
No tenía demasiado claro si al final
dedicaría una entrada a La princesa prometida. Leí el libro durante el mes de
marzo, y lo empecé con mucha curiosidad. Imagino que, a estas alturas, la
mayoría de personas ha visto la película. Iñigo Montoya no es ningún
desconocido para casi nadie y que todo el mundo sabrá lo que significa: ¡Hola, me llamo Iñigo Montoya, tú mataste a
mi padre, prepárate a morir!
Pero si no tenía demasiado claro si
gastar mi tiempo escribiendo sobre esta historia es porque mi opinión sobre
ella es bastante inestable. Me gusta, claro, pero…bueno, tampoco la considero
para tanto. Es como si unos días la valorase de una manera más positiva que
otros. Luego pensé que esta entrada me serviría para reflexionar sobre algunos
aspectos en lo referente al cine y a la literatura, como mi difícil relación
con las historias románticas, el género fantástico, y la evolución del machismo
en ambos terrenos.
Voy a empezar hablando de la
película, porque fue mi primer encuentro con esta historia. La vi hace muchos
años. Quizás veinte, o más. Cuando debía de ser preadolescente. Creo recordar
que la emitían en algún canal como película de sobremesa. El primer recuerdo
que tengo es imparcial. Sé que no me disgustó, pero tampoco me pareció nada
excepcional. Luego, con el paso de los años, me di cuenta de que La princesa
prometida estaba considerada una obra maestra. Era un clásico del cine, de esas
películas que cuantos más años pasan más nostalgia produce. En algún momento de
mi vida la volví a ver, y tuve la misma sensación. Me gustaba, pero tampoco era
maravillosa. Eso sí, ¡Iñigo Montoya era de lo más espectacular que había visto!
Siempre he pensado que este personaje le da a la historia muchísimo valor, y
que, sin él, no sería lo mismo.
Ya he dicho que pienso que todo el
mundo conoce la película, pero por si acaso, aquí os dejo una sinopsis y alguna
anotación.
The Princess Bride se estrenó en 1987, la dirigió Rob Reiner y
está basada en el libro de William Goldman del mismo nombre, escrito en
1973.
La película empieza con la secuencia de un hombre mayor que visita a su nieto
griposo, quien no ha ido al colegio ese día por no encontrarse bien. El hombre
pretende leerle un libro: La princesa
prometida, pero el nieto (interpretado por Fred Savage,
por cierto) no es demasiado aficionado a la literatura ni a los libros. Aun así,
empieza a leerle la novela, y poco a poco el nieto va mostrado interés.
Entonces es cuando comienza la historia de la princesa prometida: Buttercup (la
más bella, bellísima del reino de Florín) vive en una granja y se enamora de
Westley, el mozo de caballería. Él también está locamente enamorado de ella,
pero como se siente pobre y poca cosa, decide marchar a América a hacer
fortuna. En su viaje, su barco es saltado por el pirata Roberts, quien es
famoso por no dejar vivos entre sus víctimas. Buttercup creé que Westley ha
muerto, y cae en la desolación. Jura que jamás volverá a amar, ya que ha
perdido al amor de su vida. Tiempo después (unos añitos) el príncipe
Humperdinck, heredero al trono de Florín, desea casarse con Buttercup, y ella
accede, aunque entre los dos se crea un acuerdo de no amor (esto está bien
porque no hay mentiras desde el principio). El día antes de la boda, Buttercup
es secuestrada por un trío de bandidos: el siciliano Vizzini,
el espadachín español Íñigo Montoya, y el gigante turco Fezzik.
Los tres fueron contratados con el propósito de generar una guerra entre Florín
y el reino vecino, haciendo ver que era este último el causante del secuestro
de Buttercup. En plena huida, bandidos y secuestrada, advierten que un hombre
enmascarado y vestido de negro les sigue.
A partir de aquí la película se desarrolla
con todas las características de una historia de aventuras. Luchas de espada, príncipes,
princesas, venganzas, persecuciones, mucho amor. Todo se une en un cóctel que,
la verdad, funciona.
Y aunque no sea una de mis películas
preferidas tampoco es que no me guste, solo que no me genera esa pasión que a
muchas otras personas sí. Así que decidí leer el libro. Y la sorpresa es que me
gustó bastante más que la película. Pero no porque sean diferentes, de hecho,
el argumento y la magia que desprenden ambas versiones son iguales. Lo que
ocurre es que el libro es como una versión extendida de la película, y esto
hace que la historia sea mucho más completa.
Entiendo que las diferencias se deben
a las limitaciones que presenta una película a la hora de poder explicarlo
todo. Es imposible recoger toda la información de un libro de 400 páginas en
una hora y media o dos horas. Pero reconozco que como adaptación
cinematográfica es de las mejores que he visto.
Las diferencias no hacen que libro y
película sean diferentes, aun así, las hay:
1. El modo en el que se presenta la novela La
princesa prometida (inicio de la historia): en la película, como he
explicado antes, es el personaje del abuelo el que descubre la novela al
personaje del nieto un día que este último está enfermo.
En el libro, William
Goldman relata los primeros capítulos como una especie de diario en el que
explica sus vivencias infantiles. Se auto convierte en un personaje más. (El
autor aclaró que toda esta parte, aunque hable en primera persona, es
ficticia). El libro empieza siendo él ya adulto, infelizmente casado y con un
hijo que no le acaba de gustar. Es escritor, pero su libro ha quedado lejos del
éxito. Sumido en una infelicidad cómica (eso sí), nos da algunas pinceladas de
su infancia, de cómo se aficionó a la literatura, y cómo siendo niño estaba
obsesionado con los deportes y cómo fantasea con que su padre y su maestra se
casasen algún día. Explica que su padre era de Florín (país inventado), que
emigró a los Estados Unidos, y que un día le propuso leer La princesa prometida,
un libro escrito por un tal S. Morgenstern, el cual estaba ambientado también en
Florín. William accede a que su padre se lo lea, y es entonces cuando descubre
su pasión por la literatura.
De mayor, Billy,
o William, realiza un resumen de La princesa prometida. Aclara que es un
resumen porque la versión de S. Morgenstern tenía demasiadas páginas.
Es aquí
cuando empieza la novela dentro de la novela.
2. Las notas del autor. La princesa
prometida (me refiero a la historia de Buttercup) se presenta como un resumen
del autor, una versión de la obra de S. Morgenstern, por lo que de tanto en
tanto, existen notas entre paréntesis como apunte de Goldman, y otros de la supuesta
editora. Esto le proporciona humor a la historia, ya que la editora a veces
apunta que hay contradicciones, como que Westly marche a América si por esa
época América no se había descubierto.
3. Cómo Buttercup se da cuenta de que está enamorada. Esta parte
es bastante más extensa en el libro que en la película. En el film, esto ocurre
en apenas dos segundos, cuando Westly le baja un cántaro de un estante muy alto.
En el libro, un día los padres de Buttercup reciben la visita del conde Rugen y
su esposa. Ella prácticamente se come a Westly con la mirada y Buttercup se
pone celosa. A partir de ahí la protagonista se obsesiona con Westly.
4. Buttercup. En la película es mucho más dulce
que en el libro. En la novela es ignorante, no demasiado lista y no le gusta
asearse. Es bella pero sucia. Además, en el libro tiene un carácter bastante
más infantil y caprichoso. Aun así, se
le acaba cogiendo cariño.
5. El aspecto del príncipe Humperdinck. En la
película es un hombre de aspecto normal, ni guapo ni feo, ni alto ni bajo. Al
menos es lo que se aprecia en la pantalla. En el libro se le describe obeso.
Con aspecto de barril, bajito y con un peso de 120 kilos.
6. Iñigo Montoya. Ya he dicho que este
personaje, para mí, es lo mejor que tiene la historia. En la película, Iñigo
brilla como si fuera el propio protagonista, pero en la novela destaca muchísimo
más. Tiene un capítulo dedicado a él mismo. En la película conocemos su pasado
cuando se lo explica a Westly antes de batirse en combate con él. En el libro,
se intercala un capítulo dedicado sólo a este personaje en el que se explica
toda su vida, su infancia y cómo ha llegado hasta donde está. Mucho más
completo y épico que en la película, porque también se conoce al padre.
7. Fezzik: Otro personaje con capítulo propio.
Y aunque no es tan espectacular como el de Iñigo Montoya también da mucho más
valor a la historia conocer la vida del gigante. Hasta resulta entrañable.
8. Las criaturas del canal de Florín: en la novela
Buttercup está a punto de ser devorada por tiburones, mientras que en la película
son anguilas chillonas.
9. El libro es
infinitamente más cómico y divertido que la película. El modo de escribir del
autor es profundamente irónico.
10. El final (spoiler). En la
película el final es feliz para los buenos. Westly y Buttercup logran huir
junto a Iñigo Montoya y Fezzik hacia la libertad. En el libro, aunque logran
huir no se acaban de encontrar demasiado bien. Iñigo está gravemente herido,
Westly no está mucho mejor y Fezzik, perdido, no sabe muy bien cuál es el
camino correcto. Esto deja un final abierto en el libro, donde, además, se
advierte que el amor entre Westley y Buttercup no es tan perfecto como en la
película, y da a entender que, los cuentos de hadas no existen, que, pasado ese
tiempo de enamoramiento, ambos van a caer en una rutina que les convertirá en
una pareja en crisis. O sea, que ninguna pareja es puramente feliz para
siempre.
11. El anexo (gran spoiler). En la
edición que tengo, existe un anexo. Son unas 70 páginas que Goldman escribió
para una segunda parte de La princesa prometida. Se llama El bebé de Buttercup.
En estas páginas Waverly, la hija de Westly y Buttercup, es secuestrada por un
desconocido y Fezzik va tras este hombre para salvar a la niña. Estas páginas
se encuentran añadidas en la edición del 30 aniversario de La princesa
prometida. Compré el libro por la portada, sin saber si era edición especial y
desconociendo la existencia de estas páginas. Al llegar a esta parte no
entendía nada, porque además son capítulos que tampoco tienen demasiado sentido
si entendemos que el final ya sucedió. Investigando supe que iba a ser la
segunda parte de la historia pero que Goldman nunca la terminó.
Hasta aquí, las grandes diferencias. Aunque
hay más.
Si tuviera que elegir, me quedaría
con el libro, porque es más completo y los personajes tienen mucho más peso.
Pero hay algo que me ha chirriado mucho del libro. También es una diferencia
entre la película y la novela, y que no he añadido a la lista porque quería explicarlo
mejor. Se trata de algo que hace Westly que me ha parecido… ¿machista?… o al
menos me ha decepcionado mucho:
Westly le propina un bofetón a
Buttercup cuando por fin se reúnen. Y aquí es cuando me invade un sentimiento
puramente negativo. Westly le pega porque ella se ha prometido con otro. Pero
¿qué iba a hacer? Pensaba que estaba muerto, y han pasado años. Además, no es
que él haya vuelto enseguida, sino que se ha tomado su tiempo haciéndose pasar
por pirata y divirtiéndose. No puede tomárselo así. Entonces, si algún día
descubre que ella se ha enamorado de otro (cosas que pasan en la vida y que
también le podría pasar a él) ¿también le pegaría? No creo que se deba de
juzgar el machismo de una novela escrita hace cincuenta años con lo que hoy es
políticamente correcto. Voy a explicarme mejor. Si fuera así escenas como la de
Gilda (otro bofetón) o películas como Blancanieves y los siete enanitos
merecerían la hoguera. La madrastra de Blancanieves es el personaje más
machista que existe, ya que no es malvada por desear el poder, sino que sus
celos respecto a la belleza la llevan a pretender cometer asesinato. Pero no
debemos juzgar las historias del pasado con los ideales que tenemos hoy en día.
Mi blog se llama Lo que el viento se dejó en honor a Scarlett O’hara, a quien
si conociera en persona hoy en día odiaría por vivir en un mundo racista,
machista y desear ser el centro de las miradas masculinas. Pero me gusta porque
los personajes están bien construidos y la trama bien argumentada. Tratando de explicarme
me estoy yendo por las ramas.
Pese a todo esto, sigue sin gustarme
el bofetón de Westley, y encuentro en este gesto algo mucho menos excusable que
en los ejemplos que he mencionado. Y lo encuentro peor porque lo de Westly no
es una crítica por parte de la novela. Westley es el hombre ideal, el príncipe
azul, el hombre bueno y perfecto que nos salvaría siempre del malo. En el caso de
Gilda, no hay ningún tipo de idealización hacia Johnny Farrell (Glenn Ford). Es
como es, ambicioso, con sus cosas buenas, pero en ningún momento lo muestran
como el príncipe azul. Lo mismo pasa con Lo que el viento se llevó. Ya se sabe
que ningún personaje es bueno. Y con esto no quiero decir que el señor Goldman
fuera un maltratador ni tuviera estos pensamientos. Sólo que no me ha gustado que,
al hombre ideal, perfecto, el que se está vendiendo como el amor de tu vida,
ese Westly maravilloso, se le vaya la mano con su princesa. Me sentí como si Aladdin
le pegase a la princesa Jasmine.
Que el personaje de Buttercup sea tan
pasivo no me ha molestado, porque el libro, ya lo he dicho, contiene ese toque
de parodia. Eso sí, me ha caído peor en el libro que en la película, porque se
muestra mucho más caprichosa e irascible.
Tampoco me ha gustado que las mujeres
del reino tengan tanta envidia de Buttercup por ser tan bella y dejen de
hablarle por envidia. Ni los hombres resentidos porque Buttercup los rechace.
Pero también me lo tomo como una parodia, ya que Buttercup en algún un momento
se plantea cuál es la diferencia entre la más bella y la segunda más bella. ¿No
es esto un poco subjetivo?
Esto es lo que menos me ha gustado
del libro, esos aspectos exagerados que poseían las primeras princesas Disney.
Hoy hay personajes femeninos tan fuertes en la fantasía, como Daenerys
Targaryen, Arya Stark, Dolores Abernathy, Hermione Granger, Leia Organa, Wonder
Woman, Lisbeth Salander (aunque esto no sería fantasía, sino thriller) …que
bueno, La princesa prometida se queda un poco atrás en el tiempo. Pero vuelvo a
insistir. Hay que entender la historia de otro modo. Como un clásico de otra
generación que dio vida al gran Iñigo Montoya.
Aunque me haya centrado en la
crítica, el libro sí me ha gustado. La manera de escribir de Goldman engancha
mucho y su modo irónico hace que el libro sea muy divertido, mucho más que la
película, y también, los personajes resultan más intensos.
He comentado que haría una reflexión
sobre mis gustos respecto a la fantasía y el romance. Ninguna es de mis
preferidas, pero siempre hay excepciones, claro. Quizás es que no he encontrado
suficientes historias que me marquen. Leí El Señor de los anillos y me encantó,
disfruté muchísimo los tres libros, y Juego de Tronos es una de las mejores
series que he visto. Pero más allá de eso no soy capaz de encontrar una
historia que me motive. Y es una pena. Lo mismo me ocurre con el género
romántico. Pienso en estas historias como en las películas de Jennifer Aniston
o las novelas de Daniel Steel de mi madre. No digo que sean malas, sólo que no
me generan interés. Sin embargo, adoro La La Land y Los puentes de Madison,
incluso Un paseo por las nubes. Para que una historia me guste primero debo
encontrar alguna motivación en el personaje y creérmelo. Que me enseñen un por
qué.
Resumiendo, recomiendo leer La
princesa prometida a los fans de la película, a los que disfrutaron con la
historia de Buttercup, Westly e Iñigo Montoya. El libro y la película mantienen
la misma magia y la historia no se distorsiona, pero el libro es mucho más
completo, más divertido e irónico. Engancha desde el primer momento.
¡Hola, María! La verdad es que conozco la historia, pero el género romántico no es algo a lo que me lance demasiado ni en literatura, ni en cine... Bueno, en cine cuando tocaba cumplir con mi entonces novia y hoy esposa. Me ha encantado el análisis tan exhaustivo que has realizado, aunque al no haber leído la novela poco te puedo añadir. Sin embargo has planteado un tema interesante cuando has mencionado lo del bofetón. Personalmente, lo políticamente correcto siempre me causa un poco de mal rollo. Lo encuentro un punto falso e hipócrita cuando lo trasladamos a la ficción. Creo que el autor debe tener total libertad para confeccionar los personajes y los actos que los definen. Es ficción, pero se trata de que la historia tenga verdad. Si el personaje es machista, debe mostrarlo sin tapujos y el lector debe concederle esa libertad. De lo contrario, si al escribir estamos pendientes del qué dirán nos pueden llegar a salir historias artificiales. Cuando hablo de este tema siempre pongo como ejemplo la Lolita de Nabukov. ¿Sería publicable hoy la historia en la que un hombre mantiene un romance con una menor de edad y, encima, el autor no lo presenta como un ogro pederasta? A eso me referiero.
ResponderEliminarEn cambio, ya que la mencionas, no me gustó demasiado el tratamiento que dieron a Wonder Woman en su película. La vi el otro día y siendo ella la protagonista superheroica me pareció excesivo el protagonismo de su partener masculino al que solo le faltaba cogerla de la mano en las escenas de acción. Todo lo contrario al tratamiento de la Capitana Marvel en su película, ahí sí que es ella la verdadera heroína la que dirige la acción de forma absoluta.
Un fuerte abrazo y excelente análisis de este clásico que tras leerte seguro que leeré o veré cuando tenga ocasión.
Hola David!! El libro es mucho más divertido, pero la película es más famosa.
EliminarRespecto a lo que se considera políticamente correcto, es justo lo que he comentado. En Gilda también hay un bofetón pero la película tiene un enfoque completamente diferente. Quiero decir que Westly no debería ser así. Estamos hablando de una historia romántica que muestra al “hombre ideal”. Sería como si en El cuaderno de Noah, en Grease o en Titanic (por poner ejemplos) él le pegase a ella. Otra cosa son las historias como Lolita o la que comento de Gilda, el personaje juega otro rol, el enfoque es diferente.
Pero ya partimos de la base que las historias románticas, muy realistas no suelen ser, salvo excepciones. Y esto está relacionado con lo que comentas de la hipocresía.
Por eso decía que en Gilda o en Lo que el viento se llevó no me escandalizo, pero lo de Westly no me ha gustado mucho.
Ains espero haberme explicado bien!
Muchas gracias por el comentario!!! Un besito!!! :)
¡Hola María!! Vi la peli hace mucho tiempo y tengo claro que me gustó (puede incluso que la haya visto alguna que otra vez más), pero me pasa como a ti, que tampoco para echar cohetes, para pasar el rato.
ResponderEliminarSuele ocurrir lo que te ha ocurrido en este caso, que el libro es mejor (unas veces porque la historia narrada es mucho más amplia y con las pelis siempre se pierden detalles y otras veces porque la calidad literaria de un libro es complicado de plasmar en una adaptación cinematográfica)
Me pasa como a ti con el género romántico (no con la ciencia ficción, aunque sí me cuesta encontrar historias de este género que me motiven), que no me atraen para nada, las suelo desechar a la primera vista (aunque alguna vez reconozco que me he llevado una sorpresa, pero suelen ser historias con un trasfondo original o que me aportan algo distinto además del argumento romanticón)
Muy buena reseña!!
Besos
Exacto, está bien y es entretenida, pero no me apasiona tanto como a otras personas, que la tienen súper bien valorada.
EliminarEl libro es mejor no porque la peli esté mal adaptada, sino porque es imposible mostrarlo todo.
El género romántico me cuesta,tiene que haber algo más que la simple historia de amor. Sin embargo la ciencia ficción sí me gusta. Especialmente Isaac Asimov, que me hizo descubrir este género hace años. Luego están los cásicos Farenheit 451, 1984 y Un mundo Feliz, que los adoro!! últimamente he descubierto la novela negra, creo que me repito demasiado ya con lo de la novela negra jajaja y ahora mismo estoy encantada con Perdida, que está siendo mi lectura actual!!
Muchas gracias por el comentario guapa! Un besito!!
Menuda súper reseña te has marcado, María, ¡bravo! :) No sé si te lo he dicho alguna vez, pero yo ni intento hacer reseñas porque sé que serían una auténtica porquería; eso hace que os admire tanto a l@s que sí las hacéis y además tan bien como tú.
ResponderEliminarYo conozco la peli de oidas y he visto la cartelera mil veces, pero creo que no la he visto entera nunca. Mucho menos, como es natural, he leído el libro. Si tengo que elegir y siguiendo tu consejo, empezaría por lo segundo. Parece una historia muy entretenida que además guarda otras "perlas" entre sus renglones, como ese estilo irónico del autor o ese toque de parodia que mencionas. Apuntaré el título en mi lista :)
Respecto a ese bofetón, visto con los ojos de hoy, impacta, y en el contexto de la historia, tal y como tú lo explicas, tampoco parece que esté muy justificado. Por lo demás estoy con David: los autores tienen que ser libres de plasmar lo que imaginan para sus personajes, no lo que la sociedad considera correcto. En el sengundo caso me temo que saldrían obras muy aleccionadoras pero que despertarían poco interés. La verdadera naturaleza humana, apasionante para mi, se atiene bastante poco a los patrones que todos consideramos como "adecuados". Ahí está la dualidad, el conflicto y la posibilidad de superación.
Un millón de gracias por este post tan interesante y completo. Lo he pasado muy bien leyéndote :)
¡Un besazo de viernes!
Muchísimas gracias Julia! Me alegro de que te haya gustado la entrada!!
EliminarPeli y libro están bien, entretienen mucho y son divertidas, pero claro el libro es mejor por los motivos que digo. Más divertido todavía y mucha más información que complementa la película. Solo por el personaje de Iñigo Montoya ya hay que verla o leerlo jajaja.
El bofetón, evidentemente que cada autor debe expresarse como quiera, solo faltaría! Solo que cuando un personaje está creado a lo príncipe Disney pues no sé... no lo acabo de ver. Es como el ejemplo que le pongo a David. Una cosa es Lolita o Gilda, que son historias diferentes, de otro tipo. Pero si en Grease Danny le pega a Sandy...pues me traumatizaría un poco, porque es como que el significado de la peli y el personaje no es ese. Pero bueno, esto es lo que me imagino yo. Pero claro que cada autor debe escribir lo que considere.
Un besote Julia!! Gracias por el comentario :*
Que cambio en el blog, ¡me encanta! yo no he leído el libro y no puedo decir nada pero la película es muy entretenida.
ResponderEliminarBesos
Siii, es muy entretenida!! Mil gracias Reme! Un besote :*
EliminarNi he visto la película ni he leído el libro. Lo de "Hola, me llamo Íñigo Montoya..." lo sé de oírselo a mi hermana antes de oírlo por todas partes. Ni el romántico ni el de aventuras son géneros que me apasionen.
ResponderEliminarRespecto a las diferencias entre libros y películas son lógicas y necesarias. Seguro que ya has leído esa opinión mía de que cuanto más se parece la película al libro peor suele ser y es que la maestría no está en copiar toda la historia del libro, sino en saber adaptar una historia a un lenguaje distinto y hacer un buen trabajo. De esta, no puedo juzgar.
Has hecho un análisis fantástico.
Un beso.
Me ha encantado, María, la ¿reflexión? de hoy porque, debemos ser de "la misma quinta" y yo también he vivido sentimientos parecidos a los tuyos con esta película. Es más, creo que nunca he llegado a verla completamente. La he ido viendo a trozos a lo largo de los años y así es como he ido componiendo una historia completa. Porque realmente es lo que cuentas: no está mal, pero no está bien del todo.
ResponderEliminarAhora que, si como dices, el libro es interesante, quizá merezca la pena echarle un vistazo para enamorarme de lo que no me ha enamorado la película porque, ahí sí he de discrepar en gustos, a mí sí que me gustan los romances literarios, aunque no las novelas de amor.
Me gusta tu reflexión final sobre cómo han ido cambiando los conceptos a lo largo de la Historia. La verdad que si muchos de nosotros viviéramos en el pasado, nos echaríamos las manos a la cabeza o al contrario, si llegaran del pasado, supongo que habría quien se escandalizara. Por ello, es bueno calibrar la Historia en su justa medida. Es bueno ir evolucionando... supongo.
Una estupenda entrada, María. Un beso
Hola.
ResponderEliminarMe ha encantado la reseña.
A mí me gusta la peli. A mis hijos no les encantaba ni mucho menos pero mi hijo en la carrera, en la asignatura de guión, tuvo que verla y cambió totalmente de opinión. Y ambos la vieron el años pasado en un cine de verano y claro, eso influye porque sí les gustómás.
Respecto a los roles machistas...hace poco opiné sobre esto en un blog porque en algunos sitios quieren prohibir cuentos clásicos por este motivo y tanto la chica del blog como yo dijimoslo mismo. Lo mejor sería dejarlos tal cual y luego preguntar a los niños si les parecía bien y hacer ver que eso no es así. Vamos, educar en igualdad usando los ejemplos. A mí me gusta que los libros reflejen la sociedad haciéndola creíble, si el libro se desarrolla en una época ne que las mujeres llevaban el peso se la casa y estaban reprimidas, me gusta que en el libro sea así, no que vivan liberadas y de marravilla porque lo hace menso creíble. Pero eso hay que saber entenderlo y no asumirlo, por un lado me gusta que esas diferencias las lea gente jven para que entienda lo duro qu eera antes y lo que han cambiado las cosas y que hay que seguir cambiando, pero por otro da algo de miedo por si lo ven como algo normal y no algo que está mal.
Hay una canción de Sara Montiel, no sé si de alguna peli o de esas que cantaba en lo sprogramas de la tele, que dice algo así como ; es mi hombre, si me pega me da igual, es natural...pues no hay porqué borrarlo de la historia porque refleja lo que se pensaba en la época, una actriz que fue a Hollywood cantaba eso, quizás habría usarlo de ejemplo a las nuevas generaciones para que entiendan que las cosas no son así. Uffff, esto daría para un post.
Y respecto a novelas y pelis románticas, a mí las novelas no me suelen gustar(donde esté una novela negra) pero las pelis sí. No es mi género preferido, no es lo que veo más a menudo pero muchas veces, si quiero desconectar, si estoy un poco agobiada, no puedo dormir o he tenido un día duro prefiero ver una ñoñería, una peli de instituto o una historia de amor antes que otra cosa. Tengo una edad y veo las cosas con perspectiva, no es que quiera identificarme con el personaje, no pretendo vivir una historia d emaor de instituto, o viajar en el Titanic ni liarme con el bailarín de un hotel, solo quiero distraerme. Si quiero ver buen cine ya abusco otras cosas.
Scarlett me caería fatal, jejejeje, y El señor de los anillos me tuvo obsesionada, me encanta y requeteencanta.
Muy feliz finde y he disfrutado mucho de la entrada.
Madre mía, no releí la respuesta y tiene muchos fallitos, perdona.
EliminarHola María, te adelanto que no es mi género preferido y que la película creo que la he visto dos o tres veces,... y siempre a trozos,... la verdad que fui incapaz de acabarla,... Me pareció (perdona por los calificativos) un poco ñoña, insulsa,... y también aburrida, pero quizás eso sea debido a que no me gusta ese género. Buen fin de semana!
ResponderEliminarUn análisis que se la mano con la excelencia desde el principio hasta final, enhorabuena María.
ResponderEliminarNo he leído el libro, y la película la vi hace muchísimo tiempo y mis recuerdos son muy vagos. No obstante mi recuerdo es positivo y veía hace no mucho un ciclo de cine fantástico en las que aparecían 'Dentro del laberinto' y 'La historia interminable' que sin duda marcaron un época en ese cine fantástico de cuando éramos niños.
Respecto a la violencia en el cine hacia la mujer es casi imposible trasladar el contexto de por ejemplo Gilda al cine de actualidad. Además este caso es muy especial porque la parejita se las traía y se cascaban los dos de lo lindo :). Pero parece raro, como dejas ver, qué el típico príncipe azul sea un violento ya que de alguna manera queda invalidado como personaje en esta historia reseñada hoy.
Respecto al cine romántico habría que señalar dos diferencias: una el cine romántico de comedia que no aporta nada. Y otro el cine romántico con una historia fuerte detrás que puede elevar al género a lo más grande del cine: La La Land, Los puentes de Madison o El paciente inglés son ejemplos de cumbres cinematográficas. Por cierto, respecto a El paciente inglés me pareció infinitamente superior la película al libro.
Por último añadir que por Dios no cambien los cuentos infantiles clásicos por cuestiones de género. Sería estar reescribiendo continuamente la historia.
Nota: 10/10 ;-)
Un beso, feliz fin de semana.
A mí me pasó lo mismo con la película, que cuando la vi no me pareció nada del otro mundo. Desde aquella primera vez la he visto un par de veces más en la tele y sigo pensando lo mismo. No sé qué le ven para considerarla un clásico y una obra maestra, la verdad.
ResponderEliminarLo único que me parece genial de esa peli es la banda sonora del gran Mark Knopfler.
Haré caso de lo que cuentas y me iré al libro, a ver si le saco más chicha que a la película.
Genial entrada y muy completa.
Un besote grande.
¡Hola! Es una de nuestras historias favoritas, tanto la película como el libro son una maravilla. Además esta edición es una pasada. Los personajes son inolvidables y no nos cansamos de ver la película y releer el libro.
ResponderEliminarBesos
¡Hola! ^^
ResponderEliminarDel libro no puedo opinar, porque no lo he leído, pero vi la película por primera vez hará unos cuatro años. Tenía mucha curiosidad, ya que prácticamente es un clásico del cine fantástico y de aventuras, y aunque me esperaba más, entiendo que en su momento gustara tanto. Es una película que tiene cierto encanto, y si dejas a un lado algunos detalles (efectos especiales, algunas actuaciones...) y te centras en lo que es, o sea, un simple cuento sin más, puedes llegar a disfrutarla. Lo mejor, el personaje de Iñigo Montoya. Me quedo por tu blog y te invito al mío si te apetece :)
Besos!
Hola!Brillante reseña.me que me he leído de pe a pa. Ni lo leí ni vi la película. O alo menos no viene a mi mente.Un placer leerte.saludosbuhos Maria y reitero mis felicitaciones!
ResponderEliminarYo no he visto la película, pero sí he leído el libro, a través de una iniciativa conjunta hace un par de años y la verdad es que me dejó un poco así, pero claro es que yo tampoco soy muy de este tipo de historias y no había averiguado mucho sobre este libro. Creo que no era para mí.
ResponderEliminarUn beso
Gran trabajo el tuyo reseñando película y libro a la vez. Yo solo he visto la versión cinematográfica, y varias veces, y debo confesar que siempre me ha resultado muy entretenida e incluso divertida. La frase de Íñigo Montoya ya es todo un clásico, jeje.
ResponderEliminarAunque esta película es menos infantil, yo la equipararía a Una historia interminable o Stardust, las cuales también he visto en varias ocasiones y siempre con el mismo resutado: pasar un rato muy entretenido.
Un abrazo.
Hola María después de leer tu extensa comparativa tengo que decirte que no he visto ni la película ni he leído el libro y esa frase clásica tampoco la había escuchado nunca jajaja No sé en qué lugar vivo.
ResponderEliminarGeneralmente libros y películas son bastante distintos aunque hay algunos que sí son fidedignos. A mi me gusta leer primero el libro y me acabo quedando con el libro más que con la película aunque hay excepciones muy sonadas.
A veces cuando veo películas de hace un tiempo me doy cuenta de ese paso rapídismo del tiempo y es que ahora todo parece que "caduca" muy rápido.
Besos
Hola guapa!
ResponderEliminarNo he leído el libro pero si que he visto la película y la verdad que me gusto, me hizo pasar un rato entretenido, no se si me animare en cualquier momento con el libro.
Acabo de llegar a tu blog, me quedo por aquí y te invito al mío.
❀ Fantasy Violet ❀
Besotes! 💋💋
Hola,
ResponderEliminarLa película es buena, no es para tirar cohetes pero sí hace la función.
Los papeles están marcados , quizá demasiado dulcificado y que roza un poco la burla o el sarcasmo. La película ya tiene un tiempo. Me encantaría una con esta época. Saludos!! Keren (no me funciona muy bien el ordenador)
Sí María, trabajo en una editorial, desde 2005 soy la maquetadora de los libros de editorial Pre-Textos y también quien está detrás del perfil de Instagram, que por cierto sigues y te lo agradezco.
ResponderEliminarDesde 1985 me dedico a la maquetación, anteriormente trabajaba en una empresa de preimpresión durante 18 años, entre nuestros clientes estaba la editorial y casi siempre era yo quien maquetaba los libros, en 2004 y después de todos esos hubo un reajuste en la empresa y yo fui fuera, ya tenía 48 años, ¡muy mala edad laboralmente hablando pensé! pero tuve suerte y dos meses después de mi despido comencé a trabajar en la editorial, dentro de 3 años cumpliré 65 y me jubilo y doy por terminado mi período laboral que ¡ya he cumplido! ja ja ja. Entre unas cosas y otras llevo ya casi 40 años.
Es una editorial pequeña pero con muchos años de trabajo y muchos premios y reconocimientos y ¡se está muy bien!
Besos