domingo, 19 de noviembre de 2017

Reseña: Nada se opone a la noche


DATOS DEL LIBRO
Título: Nada se opone a la noche
Editorial: Anagrama, Colección Compactos
Autor: Delphine de Vigan
Nº de páginas: 369
Género: Narrativa
ISBN: 9788433977366

Sinopsis.

Después de encontrar a Lucile, su madre, muerta en misteriosas circunstancias, Delphine de Vigan se convierte en una sagaz detective dispuesta a reconstruir la vida de la desaparecida. Los cientos de fotografías tomadas durante años, la crónica de George, abuelo de Delphine, registrada en cintas de casete, las vacaciones de la familia filmadas en super ocho, o las conversaciones mantenidas por la escritora con sus hermanos, son los materiales de los que se nutre la memoria de los Poirier. Nos hallamos ante una espléndida, sobrecogedora crónica familiar en el París de los años cincuenta, sesenta y setenta, pero también ante una reflexión en el tiempo presente sobre la «verdad» de la escritura. En el transcurso del viaje de la cronista al pasado de su familia y a su propia infancia, irán aflorando los secretos más oscuros. Para la autora, escribir sobre su madre es cerrar heridas abiertas muchos años atrás, y recuperar la novela familiar es emprender un camino de catarsis y de superación del duelo, a la manera de Roland Barthes en sus escritos póstumos. Pero es también un ejercicio de alto riesgo, puesto que en el curso de esta investigación expone ante los miembros de su familia, como si ellos no fueran más que lectores anónimos en la multitud, su propio secreto más terrible.


Opinión personal.

Hacía tiempo que tenía ganas de hablar de esta novela, la cual leí hace ya unos años y me gustó tanto (tantísimo) que todavía me entran ganas de recomendarla a todo el mundo. Lo que ocurre es que no se puede ir recomendando por ahí sin conocer las preferencias de quien te pide consejo: género, acción, personajes, número de páginas... pero éste es otro tema del que ya hablaré en otra entrada.

Volviendo a Nada se opone a la noche, normalmente hago reseñas sobre libros que acabo de terminar o de novelas que me gustaron tanto en su día que me marcaron. Todo el mundo tiene su lista de novelas preferidas.

Antes de leer Nada se opone a la noche, conocía a la escritora por No y yo, y Días sin hambre. La primera, me pareció decente y punto, y la segunda, aunque un poco dura, excelente. De hecho, para la publicación de Días sin hambre Delphine de Vigan utilizó el pseudónimo de Lou Delvig y no su auténtico nombre, ya que en ella narra sus propios problemas con la anorexia.
Lo que me gusta de Delphine de Vigan es la autobiografía que se suele encontrar en sus novelas, ya que en ellas ha destapado más de un entresijo familiar, entresijos de los turbulentos, confrontaciones de las que no se perdonan. Y cuando creía que la autora jamás podría superar el nivel mostrado en Días sin hambre, publica Nada se opone a la noche.
La novela también es una biografía, en este caso con su madre de protagonista, Lucile, y con quien la autora mantuvo una relación tormentosa debido a los altibajos emocionales que ésta sufría. De hecho, teniendo en cuenta que la autora sufrió anorexia, podría decirse que ella también ha sido víctima de estos altibajos. Quizás de otro tipo, pero altibajos de todos modos.

Ya he dicho muchas veces que me gusta leer sobre la vida de los personajes, y que la acción corresponda a sus propias anécdotas y sensaciones, y en este caso podría decirse que Nada se opone a la noche ha sido de las novelas que más me han cautivado. Está narrada de una forma muy sensible, con un tono portentoso y honesto, sin llegar a caer en la auto compasión ni el drama excesivo pese a las situaciones vividas. La historia aborda tres generaciones de la misma familia, siempre con Lucile y sus recaídas siendo el eje. Como información adicional, la chica que aparece en la portada (guapísima, por cierto), es la propia Lucile. Se corresponde a una fotografía que la autora encontró de su madre.

La trama no tiene un gran misterio oculto, todo el que pueda contener antiguas rencillas familiares (aunque después se descubre que estas rencillas no son precisamente nimiedades), pero la forma de explicar la vida de Lucile, primero su infancia, y después sus errores como madre, me tuvieron pegada al papel. De hecho, mientras lo leía notaba como crecía mi admiración hacia la escritora, por esa capacidad de describir los sentimientos más íntimos.

Lo complicado de escribir sobre un libro cuya acción son las emociones y no una trama físicamente activa, es que no se puede explicar demasiado sin llegar a hablar más de la cuenta. Sólo diré que en la novela hay una serie de sucesos que desencadenan las reacciones de los protagonistas hasta convertirlos en miembros de una familia rota.

En resumen, Nada se opone a la noche me pareció una novela brillante, que se ha convertido en una de mis obras de referencia. A la autora, obviamente, no he dejado de seguirle la pista: recientemente ha publicado Basada en hechos reales.


Como cuando leí la novela aún no utilizaba la aplicación Goodreads, aún no la he puntuado. Sin embargo, en la plataforma tiene un 4,15 sobre 5 estrellas.

miércoles, 15 de noviembre de 2017

Relato: Muelle16


No ha visto el charco y se ha manchado el vestido. Ahora el barro en los bajos provoca una sensación de peso. Al principio se lamenta, pero enseguida ese sentimiento da paso al mal humor. Además de raído, ahora el vestido está sucio, y el roce con el suelo provoca un sonido detestable fris fris chop chop. Lo agarra con las manos y lo levanta hasta dejar los botines descubiertos, pero el vestido parece hecho de plomo. Es como arrastrar unas cadenas, o quizás es la repentina opresión en el pecho. Se siente culpable.
No, qué va, no es culpabilidad, es estrés. Bueno, un poco de culpabilidad sí que es. ¿Cómo no va a ser culpabilidad? Las decisiones tomadas no se pueden destruir, y ella, también tiene su corazoncito.
Adquiere un paso rápido y al poco consigue llegar a North Point. El maldito vestido no la deja avanzar. Es como una de esas pesadillas en la que no te mueves del sitio. ¿Por qué juega así la mente? Odia San Francisco y sus desniveles. Y odia el vestido, al fin y al cabo, fue un regalo de Jack cuando se prometieron. Y a Jack ¿lo odia? A veces sí y a veces no. Pero John...John es diferente.
Un carro cruza la calle, y ella se detiene con un gesto seco. Casi la atropellan y el cochero le ha gritado algo que, sea por estrés o por la culpabilidad que lleva dentro de su cuerpo, no ha conseguido entender. Era una bronca, eso seguro. El tono de las broncas es universal. Sin querer, el barro del vestido toca sus pies. Resopla y se queja para sus adentros, pero enseguida piensa ¿qué más da? Ya tiene los zapatos sucios.
Llega al muelle 16 cuando el reloj marca las nueve. No divisa el barco de Jack, y le invade otra oleada de pánico. El vestido le oprime el pecho, esto es ansiedad. Y lo sabe porque a estas alturas cualquier sentimiento de culpabilidad ha desaparecido.
Pasea inquieta por la madera del muelle. La niebla no permite una visión demasiado clara, pero se esfuerza en estar atenta. San Francisco es así, desnivelada y nebulosa. Y odia a Jack. Con las oportunidades que tuvo de buscar oro. Ahora vivirían en Utah, o Texas, quizás, en una casa enorme junto a un estanque. Iría a la iglesia los domingos con vestidos de bajos impecables y bien cosidos. ¡Sí la viera su madre! ¡Los bajos raídos! Si tuviera un vestido bonito, se esforzaría más en no mancharlo. Lo cuidaría.
Se frota las manos. ¿Cómo lo habrá hecho John? ¿Habrá habido sangre? ¿Violencia? ¿Habrá lanzado a Jack desde el barco? ¿Lo habrá echado a los tiburones? ¿Habrá aprovechado mientras duerme? Pasa las manos por la cara y se la frota ligeramente. Y es en ese momento que su imaginación la lleva ante John. John y su cara angulosa. John y su voz ronca. John y sus besos en el callejón. Pero este momento de debilidad se esfuma pronto. Ahora la ansiedad revierte cualquier pasión hacia él. Ya tendrán su momento romántico luego, y tratando de ser práctica, comienza a ingeniar la actitud de una viuda. Llorará por Jack, y dirá a la señora Smith lo mucho que echa de menos a su difunto marido. 
Pobre Jack, dirá, mi pobre marido, con lo trabajador que era, con lo bueno que fue conmigo, siempre en alta mar, con lo peligroso que es. Lo hacía por mí y por nuestro futuro. 
Se ha metido tanto en el papel que los ojos adquieren una apariencia vidriosa. Se siente orgullosa de su futura actuación. También piensa que deberá guardar el arpón con el que Jack pescaba. Una viuda siempre guarda esas cosas. Y poco a poco irá desvelando pinceladas de John en su vida. Si hasta casi es romántico. La pobre viuda que se enamora del hermano del difunto. En su cabeza hasta parece una novela europea. Una novela de amor. Amor y muerte. Lo tiene todo.
No obstante, primero John deberá demostrar su valentía. ¿Y si no ha sido capaz de matar a Jack?
Joh no es así. Se comprometió. Lo hará.
Entre la niebla una silueta se recorta en el horizonte, y aunque no la percibe con todos sus detalles la reconoce. Es el barco de Jack. Da dos pasos sobre la madera. Fris fris chop chop.
Entrelaza los dedos, como si rezara, y los acerca a la boca. Le parece que pasa mucho tiempo hasta que el barco llega al muelle.
Un hombre emerge entre la niebla. Baja del barco efectuando un salto brusco, poco delicado, o poco cívico, ella no sabe cómo calificarlo. Siempre ha sido así de bruto. Cuando las botas chocan contra la madera, ella aletea las pestañas sin saber qué más hacer. Tiene la sensación de que la sangre ha dejado de circular por sus venas. Se aclara la garganta, más como un gesto de orgullo. No puede permitirse perder la compostura.

-Estás muy blanca, parece que has visto un fantasma.

Se vuelve y da un par de pasos desorientados. Fris fris chop chop.
Pasa los dedos por la cara, quizás así logre pensar con mayor claridad.

-¿Has venido a buscarme? ¿A qué debo el honor? Nunca lo has hecho.

Fuerza una sonrisa y mira a su marido a la cara. Trata de actuar como minutos antes se imaginó haciéndolo como viuda.

-¿Dónde está John?

La expresión de Jack apenas se altera. De hecho, se ha encogido ligeramente de hombros, como si la pregunta fuera superflua. Pero a ella le parece que sus labios dibujan una expresión burlona.


-¿John? John está con los peces. 


lunes, 13 de noviembre de 2017

Reseña: libros de esta semana


¡Hola a todos! ¿Cómo va el inicio de semana?

Normalmente las reseñas las dejo para los domingos, pero ayer el tiempo se me puso en contra y he decidido dejarlo para hoy. He realizado una entrada con los libros que he leído esta semana, algunos son muy finitos, y se leen rápido. 
Espero que os guste.



DATOS DEL LIBRO
Título: Todos deberíamos ser feministas
Editorial: Literatura Random House.
Autor: Chimamanda Ngozi Adichie
Nº de páginas: 64
Género: Ensayo
ISBN: 9788439730484

Sinopsis.

«Hoy me gustaría pedir que empecemos a soñar con un plan para un mundo distinto. Un mundo más justo. Un mundo de hombres y mujeres más felices y más honestos consigo mismos. Y esta es la forma de empezar: tenemos que criar a nuestras hijas de otra forma. Y también a nuestros hijos.»

Opinión personal.

Creo que la definición de feminista está llena de connotaciones negativas. Hay gente que cuando oye esta palabra, su cerebro recrea de inmediato a una mujer que siempre está a la defensiva, que aprovecha cualquier oportunidad para atacar al hombre que tiene cerca, que se posiciona como detractora de la moda. Yo nunca he creído que esto sea así, pero cuando alguna mujer dice “soy feminista” enseguida se la tacha de radical.
Sin embargo, la RAE dice:

feminismo.
Del fr. féminisme, y este del lat. Femĭna ‘mujer' e -isme '-ismo'.
1. m. Ideología que defiende que las mujeres deben tener los mismos derechos que los hombres.
2. m. Movimiento que se apoya en el feminismo.

Y quizás una respuesta genérica sea: pero es que las mujeres ya tienen los mimos derechos que los hombres.
Bueno, supongo que hablando de leyes, sí. Los tienen. Pero la realidad, es que a la mujer, socialmente, se la sigue juzgando diferente en determinadas situaciones.

La escritora (Chimamanda Nigozi Adichie) nació en Nigeria en 1977. Sé que muchos ejemplos que aparecen en sus libros pertenecen a un mundo extremo, no se puede comparar Nigeria con España, y nos quedan lejos. Sin embargo, hay muchos otros susceptibles de ser proyectados a cualquier país.


El ejemplo más extendido. Una pareja se conoce. Un hombre y una mujer. Se caen bien y se gustan. Normalmente él puede generar la siguiente duda en ella ¿qué está buscando? ¿Una relación? ¿Algo serio? Sin embargo, se suele dar por hecho de que la mujer buscará una relación. (Estoy generalizando, por su puesto).

Voy a poner un ejemplo personal. Un día estaba con un grupo de amigos, y uno de los chicos dijo: nunca tendría una relación con una chica que se hubiera venido a mi casa la primera noche. Y las chicas contestamos: ¿Cómo sabes que ella sí querría una relación contigo?
Lo que quiero decir es que los hombres y las mujeres no tienen por qué tener aspiraciones diferentes en la vida, pero la sociedad hace creer lo contrario.

Se tiende a pensar que los hombres buscan poder y ellas estabilidad en el matrimonio. Y claro que existen hombres románticos con ganas infinitas de casarse y formar una familia que lo exponen abiertamente, pero en general, ésa es la idea que se concibe de uno y otro. Y después aparecen novelas como 50 sombras de Grey, que tienen un éxito terrible con una filosofía machista. Un hombre rico, joven, guapo pero con problemas de manipulación y control, conoce a una chica ingenua que accede a todas sus peticiones. Y ya no me refiero al ámbito sexual, ni al sado, ni quién es el sumiso en la cama, o mejor dicho, en ese cuarto oscuro que tiene montado el señor Grey. Me refiero a que él ejerce un control sobre ella en su vida diaria. Dónde está, qué come...En algún momento llega a presentarse en casa de su madre sin que ella le haya revelado su dirección. Pero es que claro...la quiere tanto… que no lo puede evitar, no puede vivir sin ella... Pues lo siento, pero a mí eso no me parece amor, ni respeto. Me parece que a ella le falta mundo y hombres que conocer. Yo me imagino presentándome en casa de un chico, excusándome en que no puedo vivir sin él y habiendo investigado su dirección. Es más, creo que su familia me calificaría de tarada para siempre. ¿Pues por qué cuando un hombre es celoso y posesivo es amor? Yo no lo veo así, pero es mi opinión. No sé como acaba 50 sombras de Grey, ni la trilogía ni el primer libro, porque lo abandoné. Quizás mejore, o quizás la relación se vuelva más...chunga. Lo que sí sé es que tuvo éxito. Pero es que a mí me gusta que los personajes femeninos tengan personalidad, y si no, que el motivo sea la realización de una crítica. Me pareció una novela que no beneficiaba la psicología de las mujeres.

Pero voy a centrarme ya en el libro rojo. Yo los llamo así, el libro rojo y el libro verde, porque los títulos son larguísimos.
El libro rojo tiene 64 páginas y una letra enorme, así que se lee en un suspiro. Yo lo empecé y terminé una tarde de domingo. Prácticamente, es una cadena de situaciones que ocurren en Nigeria y la opinión de la escritora al respecto.

Un tema en el que hace hincapié es la relación entre feminismo y feminidad. Se tiende a pensar que las feministas no están a favor del maquillaje, ni de la moda. Y este es otro error. Ser feminista no es ser una camionera que no ha usado un pintalabios en su vida. La misma escritora, Chimamanada Nigozi Adichie se define así: feminista feliz africana que no odia a los hombres y a quien le gusta llevar pintalabios y tacones altos para sí misma y no para los hombres”.
La escritora opina que existe un problema social en cuanto a la sexualización de los géneros. Todo el mundo desea gustar al sexo opuesto, claro, (al mismo cuando se es homosexual), pero según ella, el problema radica en que a las mujeres se les enseña más a gustar a los hombres que a la inversa. Es evidente que en la televisión, a ellos se les perdona más la carencia física. Y con esto no manifiesta que si alguien tiene belleza no la explote, lo que quiere decir es que una mujer no debería valorarse por gustar más o menos a los hombres, ni arreglarse para ellos, sino para sí misma (en el caso de que quiera arreglarse), y para sentirse cómoda.

A los hombres se les enseña a crecer personalmente y a las mujeres se les habla del matrimonio como si fuera un éxito.


DATOS DEL LIBRO

Título: Cómo educar en el feminismo
Editorial: Literatura Random House.
Autor: Chimamanda Ngozi Adichie
Nº de páginas: 90
Género: Ensayo
ISBN: 9788439732709

Sinopsis.

«En lugar de enseñarle a tu hija a agradar, enséñale a ser sincera. Y amable. Y valiente. Anímala a decir lo que piensa, a decir lo que opina en realidad, a decir la verdad (…) Dile que, si algo la incomoda, se queje, grite.»

Opinión personal.

Este es el libro verde, y aunque sigue la tónica del anterior, está escrito en forma de cartas destinadas a una amiga de la escritora. En ellas aconseja cómo educar a su hija (la amiga le había pedido ayuda previamente).
Yo creo que la petición de ayuda no es real, sólo es un medio de dramatizar ligeramente la situación, pero reconozco que la idea “cada carta un consejo” me parece original.
Los consejos, más o menos, comparten la idea del primer libro, a diferencia de que en éste, además habla de enseñar a los niños a respetar a las niñas.
También introduce el tema de los juguetes estereotipados. Y el ejemplo más claro es el de las típicas cocinitas. La escritora piensa que los grandes chefs son hombres, por lo tanto, que una cocinita sea un regalo para niñas es algo que la sociedad ha impuesto.
Tampoco me voy a extender mucho en comentar este libro porque sería hablar más de lo mismo.

En conclusión, los dos libros me han gustado. En realidad no habla de nada nuevo, ni que nadie no sepa ya. Sueldos dispares entre sexos, la exigencia de la belleza de la mujer en televisión…



El caso es que para que las mujeres podamos votar hoy, y ser independientes, para haber conseguido todo lo que poseemos ahora, muchas activistas han peleado por nosotras (imagino que hombres también), y es agradable saber que en Nigeria vive una escritora que lucha por los derechos de la mujer.

Les he dado 4 estrellas de 5 en Goodreads y sus puntuaciones son de 4,47 y 4,56 respectivamente.



DATOS DEL LIBRO

Título: Me llamo Lucy Barton
Editorial:  Duomo Ediorial
Autor: Elizabeth Strout
Nº de páginas: 224 páginas
Género: Narrativa
ISBN: 9788416261918

Sinopsis.

En una habitación de hospital en pleno centro de Manhattan, delante del iluminado edificio Chrysler, cuyo perfil se recorta al otro lado de la ventana, dos mujeres hablan sin descanso durante cinco días y cinco noches. Hace muchos años que no se ven, pero el flujo de su conversación parece capaz de detener el tiempo y silenciar el ruido ensordecedor de todo lo que no se dice. En esa habitación de hospital, durante cinco días y cinco noches, las dos mujeres son en realidad algo muy antiguo, peligroso e intenso: una madre y una hija que recuerdan lo mucho que se aman.

Opinión personal.

La semana pasada realicé una reseña de Todo es posible, donde también hablé de este libro, ya que es el primero de la biología. Digo biología por llamarlo de alguna manera, y voy a tener que rectificar algo que comenté. Este libro no es un spin-off, los personajes de las historias conocen a Lucy Barton, pero sólo son nombrados de pasada. La vida que recuerda Lucy transcurre en otros momentos de su vida, aunque en ocasiones llega a nombrar a alguno de ellos.
La novela me ha gustado bastante, aunque no tanto como Todo es posible. Es raro, porque pensaba que sería al revés. Diría que Me lamo Lucy Barton es más emotivo, ahonda en el sentimiento de soledad de Lucy originado por sus problemas familiares. Y Todo es posible se centra más en la vida fracasada de una manera irónica.
Igualmente, me ha gustado bastante, y seguiré leyendo otras novelas de la escritora.

Le he dado 3 estrellas de 5 en Goodreads, y su puntuación es de 3,51 estrellas

miércoles, 8 de noviembre de 2017

Relato: Spoiler, del verbo Spoilear


¡¡Hola a todos!! ¿Cómo va vuestra semana?
Hoy, más que un relato, he escrito un diálogo sobre un tema muy de moda en los últimos años, y que, aunque a casi todos nos molesta, hay personas que disfrutan “haciendo el mal”.
Esta entrada va dedicada a ese sector que por algún extraño motivo tiene la imperiosa necesidad de explicar el final de una película o una serie. Quizás es para demostrar que la han visto antes que tú, o quizás es que necesitan llamar la atención y no encuentran la manera.
Y como a mí no me gusta destripar, aviso que el diálogo habla sobre El sexto sentido. Imagino que a estas alturas de la vida todos la habréis visto, pero por si acaso...

¡Feliz miércoles a todos! :)


-¡Calla, no sigas!
-Pero si no te estoy explicando nada.
-Sí lo haces. No has parado de contarme cosas que no quiero saber.
-Sólo te he dicho que cuando…
-Calla, me estás spoilenado.
-¿Que te estoy qué?
-S-poi-le-an-do.
-¿Qué dices? ¿Qué es eso?
-Me estás spoileando, haciendo un spoiler.
-¿Existe la palabra spoilear?
-Yo qué sé. Existe spoiler, y el verbo lo he conjugado yo.
-¿Qué es un spoiler?
-¿Cómo que qué es un spoiler? ¿Nunca has oído esa palabra?
-...no...¿debería?
- Pues sí, me sorprende que no te suene de nada.
-Pues...no sé...y ¿qué significa exactamente?
-Un spoiler es cuando alguien te explica algo importante de la trama de una película o te estropea el final. Te destripa la sorpresa, vamos.
-Ah, ¿cuando alguien te cuenta lo que va a suceder?
-Sí, pero tiene que tratarse de una sorpresa. Imagínate que empiezas a ver El sexto sentido, y vas por ese momento en el que Haley Joel Osment está en la cama y, tapado hasta el cuello, le confiesa a Bruce Willis que en ocasiones ve muertos.
-Vale.
- Y entonces alguien te explica que, en realidad, Bruce Willis está muerto, y que por ese motivo el niño puede verle.
-¿Por qué iban a explicarme el final?
-Porque te hacen un spoiler, es lo que trato de hacerte entender.

-Pero eso no se llama hacer un spoiler, se llama ser cabrón.

domingo, 5 de noviembre de 2017

Reseña: Todo es posible



Título: Todo es posible
Editorial: Duomo ediciones
Autor: Elizabeth Strout
Nº de páginas: 275
Género: Narrativa, novela contemporánea.
ISBN: 978-84-16634-82-8

Sinopsis.


Una novela sobre el eterno sueño de ser comprendidos. Una famosa escritora vuelve al Medio Oeste americano, a la ciudad de su infancia, y desencadena una serie de historias narradas por aquellos que la conocieron: recuerdos de soledad y condescendencia, sutiles y poderosos sentimientos; y el siempre creciente abismo entre el desear y el tener. 



Opinión personal.

A pesar de que el título pueda hacer creer que se trata de un libro de auto ayuda (o al menos a mí me lo pareció, y ya estamos otra vez con los prejuicios que generan las portadas, etc etc...) esta novela recoge varias historias de personajes relacionados entre sí. Son historias de personas provincianas, un tanto fracasadas o que no han disfrutado de situaciones precisamente fáciles, y esto lo convierte en un libro muy humano. A mí me gustan mucho las “historias de pueblo” o que realizan hincapié en las relaciones humanas, por lo que esta novela en concreto, me ha parecido brillante. En realidad, la última vez que encontré unos personajes tan reales fue en Nada se opone a la noche, de Delphine de Vigan (una de mis novelas preferidas, que por cierto, también recomiendo).
Además, Todo es posible ha sido un enorme y maravilloso descubrimiento. Hace un par de semanas ni siquiera conocía a la escritora (Elizabeth Strout) y ahora sólo pienso en leer el resto de sus novelas, que tampoco son muchas.

¿Cómo decidí leer el libro? La novela no la elegí entre las estanterías del Fnac, sino que me la regalaron. De ahí a que esté tan sorprendida y la considere mi descubrimiento del año. Y como ya he dicho, al ver el título pensé: pero esto ¿de qué va? Parecía muy moral. Después leí en la contraportada las críticas de Fernando Aramburu, Publishers Weekly y Vogue, y creí que si tanta gente diversa la respetaba, sería por algo. Porque ya me diréis qué tiene que ver Aramburu con Vogue…
Total, que aun teniendo una lista enorme de lecturas pendientes, le di preferencia, y no me arrepiento. Además, recientemente, he leído que con su novela Olive Kitteridge, la escritora ganó el Premio Pulitzer en 2009.

El ritmo de la novela es ágil, y es muy fácil de leer. Está ambientado en la América profunda, y trata temas como las familias desestructuradas, la infelicidad dentro del matrimonio, y esa sensación de arrepentimiento por no haber sabido elegir una vida mejor cuando se tuvo la oportunidad muchos años atrás.
Como he dicho, es un libro que ahonda en las relaciones humanas.

El único inconveniente es que es la continuación de otra novela de la autora (Me llamo Lucy Barton), la cual me he comprado ya y empezaré en breve.
Así que, aunque ambas novelas se pueden leer de forma independiente, tengo la sensación de haber empezado la historia por el final. Para aclarar las cosas: Me llamo Lucy Barton trata sobre una mujer exitosa que recuerda su infancia y adolescencia infeliz en el pueblo donde se crió. Y Todo es posible, recoge varios relatos sobre personajes que conocen a Lucy Barton.
No es que sea una segunda parte, más bien es un spin-off. 



En conclusión, Todo es posible es una novela muy íntima, que recomiendo a quien le guste las historias humanas que más bien parecen anécdotas en la vida de alguien.

Le he dado 5 estrellas en Goodreads, y su puntuación general es de 3,83 sobre 5.